Quedan poco más de tres semanas para la maratón de Barcelona y cinco para Arinaga. Desde el lunes estoy intentado volver a arrancar con los entrenamientos, pero la verdad es que me está costando bastante. Mis molestias físicas se habían ido, aunque al volver a moverme me he dado cuenta de que no han remitido del todo, pero descartado un problema de gravedad, esta semana he retomado los entrenamientos, aunque manteniéndome especialmente sensible ante posibles recaidas.
Ya tengo en mis manos la ropa con la que haré de pacemaker en la maratón, gracias a R.P.M.Racing, que nos ha facilitado la equipación completa Mizuno para el evento, incluidas las zapatillas Mizuno Wave Precision 9, con las que aun no he corrido, pero que tienen muy buena pinta.
En los próximos días saldré a entrenar con ellas y participaré en la media maratón de Gavà dentro de dos domingos. Si me van bien en la maratón, seguramente se conviertan en mis zapatillas de competición para los triatlones de larga distancia, ya que estéticamente me encantan.
Con la equipación de pacemaker y las Mizuno wave precision:

Hoy ha sido mi primer día de bici, con 45km totalmente llanos al salir del trabajo. Durante gran parte del recorrido iba pensando que si me compraran todas mis bicis, equipaciones y demás, dejaba el deporte, porque parecía que estaba entrenando únicamente por compromiso. Pero bueno, luego poco a poco ya empecé a ir más a gusto y si mantengo un poco de continuidad los próximos días, imagino que volveré a disfrutar de hacer km y salir a entrenar.
Y para no dejar para mañana lo que puedo hacer hoy, aprovecharé para asistir al entrenamiento de carrera a pie conjunto con los triatletas del Prat, que llevo un mes sin ir y así sumo mis primeros km a pie de febrero. A ver qué se siente corriendo...